Si te estás planteando realizar una instalación solares en tu vivienda o negocio, seguramente te hayan surgido algunas dudas. ¿Cuántos paneles necesito? ¿Qué potencia hace falta para cubrir las necesidades de un hogar? Para contestar a estas preguntas es necesario saber cómo dimensionar una instalación fotovoltaica, de modo que sea lo más eficiente posible. Y en ello influirán factores como el consumo que realizamos normalmente, la ubicación de la casa y la orientación de las placas solares, por ejemplo.
Cuando hablamos de dimensionar una instalación, nos referimos a la cantidad de paneles que colocaremos en nuestro tejado. Para ello, deberemos confiar en la empresa instaladora, que debe encargarse de que el sistema se ajuste a tus necesidades y a las características de tu vivienda después de estudiar la cubierta, la superficie, la orientación y la inclinación.
¿Por qué es importante adaptar la energía producida a la consumida?
Aunque muchas personas lo creen, no es posible hacerse rico vertiendo energía a la red eléctrica. Con lo cual, no tiene mucho sentido instalar más placas de las que realmente vamos a necesitar. Es cierto que el vertido de excedentes puede suponer un ahorro extra, pero no es motivo para sobredimensionar la instalación. Además, la forma de compensación por parte de la comercializadora eléctrica es un descuento en la factura, pero no un ingreso de dinero.
Una instalación correctamente dimensionada (al menos en cuestiones de rentabilidad), es aquella que autoconsume de forma instantánea el máximo de energía posible sin verter demasiada a la red.
Si sobredimensionamos la instalación, tardaremos mucho más en amortizar la inversión. Pero además, estaremos desaprovechando la energía y veremos como la energía sobrante no se compensa lo suficientemente alto como para rentabilizar más paneles de los necesarios.
Solamente encontramos algunas excepciones en las que sobredimensionar una instalación sale rentable. Por ejemplo, tengamos un coche eléctrico y queramos poner un cargador en nuestra vivienda, o que tengamos pensado amplia o reformar la estructura de nuestra vivienda en el futuro.
En cualquier caso, lo cierto es que sin un estudio previo, es imposible que la instalación sea la más apropiada para nuestras necesidades.
¿Qué tener en cuenta para dimensionar una instalación fotovoltaica?
A la hora de dimensionar una instalación solar, es fundamental tener en cuenta algunos factores:
- Consumo energético: un aspecto esencial que debemos valorar para determinar el tamaño de una instalación fotovoltaica es saber cuál es nuestro consumo energético. Para ello, tenemos que fijarnos en los kWh que consumimos a lo largo del año, discriminando el consumo durante las horas de sol.
- La inclinación y la orientación del tejado: si vamos a colocar los paneles sobre el tejado, es importante saber que cuanto más espacio tengamos orientado al sur, más aprovecharemos la instalación.
- Superficie disponible: tenemos que contar con el espacio necesario para instalar la cantidad de paneles que vamos a necesitar. En este sentido, debemos tener en cuenta las zonas de sombra, ya que limitarán la potencia que podemos instalar.
¿Cómo calcular el consumo energético de una vivienda?
Antes de dimensionar una instalación fotovoltaica, es importante con la mayor certeza posible cuánta energía vamos a necesitar para cubrir nuestra demanda. Para ello, tenemos que saber los kWh que consumimos y las horas del día en las que los consumimos. Datos que podemos averiguar echando un vistazo a nuestra factura.
Hay que tener en cuenta que no es lo mismo hacer un mayor consumo de energía durante el día y emplear la electricidad directa de los paneles solares que consumir sobre todo de noche. En estos casos, lo más recomendable es instalar un sistema de acumulación con baterías.
Pongamos por ejemplo que nuestro consumo anual durante las horas de sol de 20.000 kWh/año y que nuestra vivienda se encuentra ubicada en el centro peninsular, donde suele haber una media de 1.600 horas de sol pico al año, es decir, las horas en las que las placas trabajarán a máxima potencia. Haciendo el cálculo, la potencia total que necesitaremos será la siguiente:
Consumo Vivienda / HSP = 20.000 / 1600 = 12.5 kWh = 12.500 Watt
Si los paneles solares son de 320 W cada uno, el cálculo final será el siguiente:
Potencia total de placas solares / Potencia unitaria de la placa = 39.06 placas solares -> 39 o 40 placas solares.
Para consumos muy pequeños, como pueden ser televisión, bombillas, bomba pequeña de presión o alarmas, con 12V suele ser suficiente. Para consumos pequeños y medianos, como nevera, lavadora y microondas, por ejemplo, lo normal es que no se superen los 24V. Y para consumos medianos y grandes que incluyan el uso de muchos electrodomésticos, necesitaremos unos 48V.
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¿Cómo dimensionar el espacio necesario para una instalación solar?
Una vez que tengamos clara la cantidad de paneles solares que necesitaremos, es el momento de verificar si contamos con el espacio suficiente para instalarlas. Para lo cual, tendremos que tener en cuenta el tipo de placas, si hay sombras y la orientación del tejado. Pero además, debemos descontar los obstáculos que podemos encontrarnos, como antenas, chimeneas o sombras que limiten la potencia de los paneles.
En el caso de que no contemos con espacio suficiente para poner la instalación solar, la alternativa puede ser optar por placas fotovoltaicas con mayor eficiencia que produzcan más energía por metro cuadrado, de modo que no necesitemos instalar tantas. Normalmente se necesitan entre 5 y 8 metros cuadrados por cada kWp de placas solares. Pero si el módulo es más eficiente, necesitaremos menos.
Pero además, es fundamental que el tejado se encuentre en buenas condiciones. Y es que, generalmente, este tipo de instalaciones se colocan sobre una estructura anclada al tejado existente. Si el tejado es antiguo y tienes pensado cambiarlo en los próximos años, es aconsejable esperar al cambio para realizar la instalación. Hay que tener en cuenta que el ciclo de vida de una instalación es de más de 25 años.
